Sara Hebe brilla con su tour por España

Gritos, bailes, pogos y descontrol. Si hay algo que caracteriza los directos de Sara Hebe, es que las reglas están para romperse. Y su última gira por España, no fue la excepción.

Empezó su recorrido por el Studio 54 (León); se presentó en el prestigioso Festival Vive Latino (Zaragoza); prendió fuego la mítica Sala Apolo (Barcelona); colgó el cartel de sold out en Matisse (Valencia); llenó el Teatro Eslava (Madrid) de fans, que no dejaron de bailar; y finalizó con un show épico en el escenario del Festival Boreal (Tenerife).

Desde León hasta Tenerife, cada presentación fue un torbellino: los ritmos de Beivip, su último EP, se fusionaron con los principales éxitos de su extensa discografía; caracterizada por canciones que tienen cómo bandera la experimentación musical y letras ácidas, con fuerte carga social.

Cada fecha tuvo su particularidad pero la fiesta siempre reinó. En Barcelona, la energía bailable del show se transladó al after-party de la Fiesta Wacha. Y su reciente fecha en Madrid, contó con la participación de la joven artista urbana, K1za y de Florencia Linyera a.k.a Romea (Kumbia Queers), que hicieron que el show sea aún más especial.

Acompañada en cada edición por la batería de Edu Morote y su guitarrista, Lulú Hojman, cantó sobre el escenario “Tuve que quemar” y “Asado de faso”, los hits de su primer disco, La Hija del Loco (2009); hubo lugar para las bases reggaetoneras de “Teta” y “Sal Fina”; rapeó aquellas barras que forman parte de pancartas alrededor del mundo, como “A.C.A.B” e “Historika”; y no faltó, para cerrar los shows, la cumbia de “El Marginal”, del éxito de Netflix.

Con cada ciudad conquistada y cada fiesta desatada, Sara Hebe reafirma su posición como una de las artistas más influyentes y apasionadas en la escena musical actual. No se trata solo de música, sino de un movimiento que desafía las convenciones y nos recuerda que la música puede ser una poderosa herramienta para el cambio social.