“Lucibeth” representa el mundo de las tentaciones asociadas a la adicción. Placenteras, pero dañinas, esclavizadoras y captoras de la voluntad. En este caso, la dependencia es la generada por el embrujo de lo bello, de lo prohibido y de la pasión carnal y emocional vivida con otra persona.

El “Hombre”, entregado a Lucibeth y adicto de su influjo, acude en su búsqueda. Se introduce en su caótico y abandonado templo una “última vez” más, atrapado en un bucle de deseo, frustración y dependencia que se repite cada noche. Sufre, dada su enorme ansia de libertad. Ha hecho y hará todo lo posible por estar cerca de ella. Es un alma decadente y desesperada que un día gozó de una vida “normal”. Ahora está perdido y condenado a un destino fatal…

Lucibeth es, al fin y al cabo, una fuerza adictiva tremendamente seductora y sensual que le espera una vez más. Pero tremendamente seductora y sensual. Una leyenda urbana y una leyenda rural. Femenina, pero con rasgos ligeramente andróginos, sabedora de su atractivo… a veces dulce, a veces iracunda o temperamental. Porque ella no es una sola criatura, son muchas. Es una “femme fatale” del infierno. Es fuego negro. Más carnal e instintiva que sofisticada. Pero elegante en su naturalidad. La danza con cuerdas no es más que una trampa. Un truco que pretende simular su entrega al hombre, cuando se trata de un hechizo recurrente que le esclavizará cada vez más…

Videoclip: BÁLSAMO AV (Lilen Barberis y Maia Basso)
Actriz Lucibeth: PATRICIA QUIRÓS (performer)
Maquillaje y estilismo: BELÉN RUBIO y DIEGO PÉREZ
Localización: Fábrica Abandonada de Quesos en Miraflores de la Sierra (Madrid)